La canción del camino viejo
El primer mundo está ahí, del otro lado de la carretera. Sólo hay que cruzar la ruta para sentir la fragancia del progreso. De este lado, en cambio, sobrevive lo artesanal en una empresa familiar que pelea contra su propio destino para no desaparecer. Nuestro cronista viajó al neoliberalismo de un par de décadas atrás, se enfrentó a un pasado que se actualiza y escribió lo que sigue.